La ciudad británica de Manchester fue el centro de concentraciones simultáneas de antifascistas y nacionalistas. Las acciones acabaron con detenciones.

Centenares de activistas denominados Unidos contra el Fascismo de Manchester salieron a las calles para manifestarse contra la Liga de Defensa Inglesa (EDL, por sus siglas en inglés), una agrupación de derecha radical.

Centenares de simpatizantes de la derecha radical acudieron a la céntrica plaza de Albert Square, donde agentes de policía custodiaban la seguridad, manteniéndoles aparte de la marcha antifacista que, a su vez, protestaba contra las ideas de la EDL.

Mientras transcurría la manifestación hubo casos de choques con la Policía. Como resultado 15 personas fueron detenidas, tanto manifestantes de la EDL como antifascistas.

Asimismo, los manifestantes de la derecha radical arrojaron dos bombas de humo contra los agentes de seguridad. La EDL, que se define a sí misma como un grupo que "protesta pacíficamente contra el islam" y que afirma que tiene más de 100.000 seguidores en Reino Unido, ya tiene algunos antecedentes de choques violentos.

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